jueves, 23 de junio de 2016

Una vicaría con mucho movimiento



Exite una vieja vicaría situada en el pequeño pueblo de Borgvattnet en el condado de Jamtland al norte de Suecia.
Varios de los párrocos que vivieron en la vicaría a lo largo de los años tuvieron experiencias extrañas mientra residieron allí.
Un párroco anciano fue bendiciendo el lugar en 1876, pero no fue hasta noventa años después, en 1927,cuando se produjo el primer encuentro con un fantasma. El Capellán, Nils Hedlund en el momento clave experimentado, vio varias cosas que no pudo explicar con la lógica que era habitual.
Le ocurrió un incidente con su ropa. Cuando hacía su camino hasta el ático para recoger más de su ropa lavada, vio una fuerza invisible derribando sus ropas ya tendida en la cuerda.
El sacerdote que vino a residir en la vicaría en la década de 1930 fue Rudolf Tangden. Mientras él estaba sentado en una habitación vio a una mujer mayor vistiendo de gris, él se levantó para preguntar lo que ella quería, pero cuando entró en la habitación, simplemente se desvaneció.
El sucesor de Tangden, fue Otto Lingren vivió en la vicaría en la década de 1940. Él y su esposa oyeron ruidos inexplicables y vieron objetos moverse. Oyeron incorpóreos pasos en el pasillo y también escucharon música en esta zona.
Una visitante, Inga Flodin, que se quedó en la habitación de invitados fue despertada en medio de la noche con la sensación de que estaba siendo vigilada por tres ancianas sentadas en un sofá contra una pared en la habitación. Todas ellas parecían estar llorando.
Cuando ella se había ido a la cama el sofá no había estado en la habitación y cuando ella se despertó a la mañana siguiente tampoco estaba allí.
Erik Lindgren, otro capellán asignado a la vicaría en 1945 vivió varias experiencias inusuales, incluyendo uno que se produjo cuando se mudó. Cansado de desempacar se sentó en una mecedora a leer un libro.
De repente, esta silla se inclinó hacia adelante y acabó expulsado. Lindgren afirmó que cuando se sentó otra vez sentía una fuerza poderosa entrar en su cuerpo.
Hoy esta mecedora es vista meciéndose sin ninguna ayuda aparente.

Muchos de los invitados han quedado aquí informes de actividad extraña.
Estos informes incluyen: sombras, pasos en las escaleras, una mujer gritando, alguien llorando, golpes, y una mujer se ha visto en un espejo pero solo el reflejo.
Una pareja estaba haciendo el camino para bajar las escaleras cuando una entidad invisible agarró el brazo del marido. Éste fue arrastrado por el resto del camino hasta salir al patio.
La pareja se negó a entrar a la casa, desde entonces dormían en una carpa en el césped, fuera del alcance del lugar.
Varios invitados han informado de que les despertó una fría sensación de una mano invisible pasar por sus frentes.

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